Pumpkin pie (la tarta de calabaza) es un clásico navideño en los Estados Unidos. La verdad es que aquí no comemos mucha calabaza pero el Pumpkin pie es omnipresente en las casas americanas, empezando el Día de Acción de Gracias hasta después de Navidad, Como muchos platos clásicos y tradicionales, la mayoría de tartas de calabaza dan vergüenza. La tarta o no sabe a calabaza sino a un puré insípido y pastoso o está demasiado dulce o la corteza está húmeda, vaya incomestible.
Otro asunto es que la mayoría de estas tartas tienen un problema de guarnición inadecuada. ¿Por qué siempre la acompañan con nata montada? Ya tienen muy conseguido el sabor lactoso, no sería preferible algún contraste de textura o sabor, para variar ¡A mi sí!
Sin embargo, un buen pumpkin pie con una buena guarnición es increíble. Sabe a calabaza, tiene una textura de seda, una corteza crujiente, unos matices profundos, caramelizados y únicos. Tardé unos años en pillar la exclusiva receta perfecta de esta tarta, pero por fin lo hice y la verdad es que ahora soy un pumpkinpieomano.
Para empezar, hay que hacer un puré de calabaza cómo Diós manda. Escoge una buena calabaza de 2 o 3 kilos (como esta http://en.wikipedia.org/wiki/File:Pumpkins.jpg). Córtala por la mitad y quita las pepitas (puedes reservarlas para tostarlas). Sazona la calabaza con un poco de sal kosher y un poquito de azúcar demerara. Mete la calabaza en el horno a 200ºC durante unos 45 minutos. Sácala del horno y déjala enfriar una hora. Con una cuchara sopera, quita la carne de la calabaza y tritúrala hasta que consigas un puré fino.
Para la corteza, baja el horno a 175ºC. En el mini-pimer, combina 170 gramos de galletas de jengibre (o galletas maría), 15 gramos de azúcar moreno, 5 gramos de jengibre en polvo y 28 gramos de mantequilla derretida. Aprieta la mezcla en el fondo de un molde para tartas de 23 cm de diámetro. Pon la corteza en el horno durante 12 minutos. Sácala del horno y déjala enfriar durante 15 minutos.
Para el relleno de calabaza, calienta 450 gramos del puré de calabaza en un cazo. Añade al puré de calabaza 240 mililitros de nata, 2,5 gramos de nuez moscada, y 2,5 gramos de sal kosher. Saca la mezcla del fuego y déjala enfriar durante 10 minutos. En un kitchen aid con varillas, mezcla 125 gramos de azúcar moreno con 2 huevos y una yema. Combina la mezcla de huevos/azúcar con la mezcla de calabaza y pon la masa en la corteza ya horneada. Hornea la tarta a 175ºC durante 50 minutos. Sácala del horno y déjala enfriar durante 3 horas fuera de la nevera. La tarta está en su punto un día después de cocinarla.
Para la guarnición, haz unos chips de plátano macho azucarados, unas semillas de granada y fruta de la pasión crudas y unas almendras garrapiñadas con sésamo, fleur de sel y un poco de cardamomo verde.
Merry Christmas! Bones Festes! ¡Felices Fiestas!